Los miembros de la tripulación en una misión a bordo de la estación espacial Tiangong de China completaron con éxito las reparaciones después de que un trozo de desecho espacial colisionara con un panel solar, lo que provocó un corte de energía parcial en un área de la estación. Esa fue la revelación oficial de la Agencia Espacial Tripulada de China (CMSA) en una conferencia de prensa el 24 de abril.
Los resultados de la investigación mostraron que un trozo de desecho espacial chocó inesperadamente y cortó el cable de alimentación que conecta el ala del panel solar del módulo central. Los astronautas de la misión Shenzhou 17 tuvieron que realizar dos caminatas espaciales fuera de la estación Tiangong el invierno pasado para reparar los daños, la más reciente de las cuales tuvo lugar a principios del mes pasado. Todavía no está claro si los escombros que dañaron la estación Tiangong provienen de micrometeoritos o de actividad humana.

Está previsto que la tripulación de la Shenzhou-17 regrese a la Tierra el 30 de abril, después de completar el traspaso de las operaciones de la estación a la próxima tripulación de la Shenzhou-18.
Los funcionarios de la CMSA dicen que están trabajando para optimizar sus procedimientos de advertencia y prevención de colisiones en el espacio, con el objetivo de reducir la tasa de falsas alarmas en al menos un 30 por ciento y prometiendo mejorar aún más ese número en el futuro.
Como medida adicional para mejorar la seguridad, la cámara de alta resolución del brazo robótico de Tiangong, junto con la cámara portátil utilizada por los astronautas durante las caminatas espaciales, se utilizarán para examinar cuidadosamente el exterior de la estación para evaluar cualquier signo de una posible colisión, así como analizar el mecanismo de impacto de pequeños escombros.
La estación espacial Tiangong opera actualmente en la órbita terrestre baja, entre 340 y 450 kilómetros (210 y 280 millas) sobre la superficie de la Tierra, donde se encuentra la mayor parte de los desechos espaciales peligrosos. Anteriormente, la estación tuvo que ajustar su posición varias veces para evitar colisionar con densos desechos espaciales flotantes.
Según estadísticas de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de Estados Unidos (NASA) en 2019, actualmente hay alrededor de 22.000 objetos creados por el hombre orbitando la Tierra, incluidos satélites activos y dañados, satélites fuera de servicio e innumerables fragmentos de viejos cohetes que se han utilizado en la exploración espacial humana durante el último medio siglo. De este modo, no sólo ensuciamos el medio ambiente natural en el suelo, sino que también dejamos una plétora de "huellas del mundo civilizado" en el espacio exterior.
Otro estudio realizado por la NASA sostuvo que el 99% de todos los satélites actualmente en el espacio deben ser sacados de la órbita terrestre en un máximo de cinco años para garantizar que el riesgo de una colisión en el espacio siga siendo bajo y seguro. El problema mayor, sin embargo, es que sin comunicación con el satélite, será muy difícil controlarlo y retirarlo de la órbita de la Tierra.